El otro día, dándole vueltas a la cabeza a ver que hacía con manzana, se me vino a la cabeza la receta de perdices estofadas en dulce, y me dije: ¡Vaya, con lo bien que le van al cerdo este tipo de sabores...!. ¿y si le añado manzana que tampoco le va mal?.
Y este es el resultado. Un plato sorprendente tanto por la textura de las carrilleras (seguramente por todos vosotros conocida), los aromas y sabores dulces del haba tonka, y la acidez de la compota de manzana.
Para mí, una delicia. Para los amigos con los que compartí este plato en casa, ¡espectacular! (palabras textuales). Y no es por nada, pero estaba riquísimo.
Ingredientes (4 personas):
8 carrilleras de cerdo (si son de ibérico mejor que mejor)
2 cebollas blancas
4 dientes de ajo
1/2 haba tonka (unos 0,25 gr.)
Aceite de oliva
Sal común
3/4 de litro de vino blanco (uva moscatel)
Preparación:
Con carácter general el casquero ya nos las vende muy limpias, pero es muy importante que le digáis que os la deje enteras. Nada de cortar a la mitad o en trozos. Perdería mucho la presentación final...
Empezamos lavando las carrilleras en agua fría abundante. Dejamos escurrir. Secamos con un trapo y freímos en una sartén con aceite bien caliente (a más de 150º C) para sellar la carne (fenómeno de Maillard). Este paso es muy importante. A medida que se van friendo (solamente que adquieran un color ligeramente dorado) reservamos en un plato.
Empezamos lavando las carrilleras en agua fría abundante. Dejamos escurrir. Secamos con un trapo y freímos en una sartén con aceite bien caliente (a más de 150º C) para sellar la carne (fenómeno de Maillard). Este paso es muy importante. A medida que se van friendo (solamente que adquieran un color ligeramente dorado) reservamos en un plato.
NOTA: yo suelo utilizar para freír las carrilleras la misma olla en la que luego las voy a cocinar, retirando el aceite sobrante.
En esa olla retiramos el aceite sobrante y echamos la cebolla picada en brounoise gruesa y los ajos pelados y enteros; sazonamos y dejamos pochar (fuego medio), removiendo de vez en cuando para que no se nos pegue, hasta que se dore ligeramente la cebolla.
En ese momento añadimos las carrilleras que teníamos doraditas y rallamos medio haba tonka.
Incorporamos el vino blanco (que por cierto, no he dicho que me lo ha regalado mi amigo Ramón, el de los membrillos, que lo hace su hermano en la finca de Málaga; gracias "Mosqueras") y ponemos al fuego vivo. Cuando rompa a hervir lo bajamos al mínimo, tapamos y dejamos cocer sin abrir (sin abrir, ¡eh!, sin abrir) durante dos horas.
Apagamos el fuego, y sin abrir, dejamos reposar hasta el día siguiente.
En ese momento añadimos las carrilleras que teníamos doraditas y rallamos medio haba tonka.
Incorporamos el vino blanco (que por cierto, no he dicho que me lo ha regalado mi amigo Ramón, el de los membrillos, que lo hace su hermano en la finca de Málaga; gracias "Mosqueras") y ponemos al fuego vivo. Cuando rompa a hervir lo bajamos al mínimo, tapamos y dejamos cocer sin abrir (sin abrir, ¡eh!, sin abrir) durante dos horas.
Apagamos el fuego, y sin abrir, dejamos reposar hasta el día siguiente.
OTRA NOTA: este plato lo suelo hacer la víspera por la tarde, para que repose, es como más rico está. Sin duda alguna es un plato para temporada fría, porque lo dejo una noche fuera del frigorífico.
Pues ya al día siguiente, abrimos la olla, ponemos el fuego al máximo y dejamos que rompa a hervir. Sacamos las carrilleras con cuidado de no romperlas, las limpiamos de cebolla y reservamos en un plato.
Colamos el caldo de la cocción por un chino y lo echamos en un cazo con el fuego al máximo, para que reduzca, reservando una pequeña cantidad en una sartén para calentar posteriormente las carrilleras.
Cuando vaya a alcanzar la textura que deseemos (generalmente consistente, melosa...) retiramos del fuego.
La cebolla que ha quedado en el chino la pasamos al vaso de la batidora y trituramos al máxima potencia. Una vez triturada la pasamos por un colador para obtener una textura más fina.
Antes de servir tendremos que dar un hervor a la salsa obtenida.
Listas para emplatar.
Presentación:
Una vez calentitas las carrilleras las disponemos en un plato llano, en el que previamente habremos echado una cucharada sopera de salsita de cebolla, encima una quenelle de compota de manzana, calentada previamente y ahora la carrillera.
Salseamos con la reducción y decoramos con unas hojitas de romero fresco.
Carrilleras de cerdo estofadas con haba tonka y compota de manzana. |
Muy chula la receta. Sobre todo, la idea del aprovechamiento de la cebolla. Separada de la salsa, pero aprovechada para el plato. 'Pectacular' ;o)
ResponderEliminarComo sea para el concurso de Canal Cocina te van a descalificar por abusón jejejejeje.
Pues si Nacho, he aprovechado y la he subido al concurso de Canal Cocina.
Eliminar;-)
A ver si hay suerte, porque con el pedazo de regalo para el ganador, va a haber tortas...
Gracias por tu comentario.
Me quedo sin palabras, sin probarlas también digo ¡Espectacular!
ResponderEliminarLa anoto para el futuro.
Saludos
Apicius, si se queda sin palabras vaya al médico, que este año la gripe viene fuerte...(es broma).
Eliminar;-)
En cuanto a probarlas, cuando se pase por Madrid avise, y se las preparo.
Me alegro que le guste.
Un fuerte abrazo.
Maravillosas!
ResponderEliminarGracias Helena.
ResponderEliminarSí señor, de casquería también vive el hombre. Y como soy muy aficionado a las carrilleras no tardaré mucho en hacer tu receta, quizás sustituya el vino blanco por PX, si me lo permites.
ResponderEliminarSe me olvidaba.... la foto impresionante
ResponderEliminarGracias por tus comentarios Alex.
ResponderEliminarSi quieres hacer las carrilleras con PX me parece fantástico pero he de decirte que no tiene nada que ver el sabor final que vas a obtener (también muy bueno), el dulce y la potencia del PX va a enmascarar el haba tonka (toque fundamental de esta receta).
El vino blanco que yo recomiendo es blanco de la variedad moscatel, no es un vino de licor, por lo tanto no es muy comparable con el PX.
Pero bueno, hazlas con PX y me cuentas.
De nuevo GRACIAS.
Que delicia de plato!!!! Tiene que estar tan sabroso! Gracias por la receta!
ResponderEliminarGracias por tu mención al vinito familiar que efectivamente está muy bueno (peloteo a mi hermano).
ResponderEliminarInvitame a probarlas "so mamón"
Ay Mamón, Mamón, digo Ramón, Ramón....
EliminarYa sabes que, en trayendo vino... hay comida.
;-)
Yo soy el del vino,me siento orgulloso de que haya gente que aprecie lo que estamos haciendo de forma NATURAL.Ahhhhhh, tambien hacemos tinto con uva tempranillo y aceite de oliva.(Solo para algunos privilegiados) Jajajajaa. Saludos PATATO & FAMILY
ResponderEliminarYo soy un privilegiado me honro en haber catado su botella de aceite y vinos.
EliminarPedro
Patato, me alegro que te haya gustado la receta. Lo que tienes que hacer es mandarme muestra (jejeje) y ya veremos que hacemos.
Eliminar;-)
Un abrazo y gracias por el VIÑA PIZPAJITA.
La muestra ven a buscarla y hacemos alguna elaboración "in situ", se me olvidó decirte que tambien nos dedicamos al alojamiento "rural", visita la web alorarural.com , siendo amigo de Ramón tienes los caminos del Sr. allanados. Un abrazo PATATO & FAMILY
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