Igual por la calidad de los productos que emplea en su cocina, o por la amabilidad y familiariedad de sus camareros, o por el trato cordial del propio Adriano, o de Dora (su mujer) cuando está por allí.
Lo cierto es que llevo muchos años comiendo en sus mesas y aún no se por qué será... ¿Será por qué estoy como en casa?...
Nada más sentarte Adriano te suele llevar unos bígaros y algo más, hoy un salpicón de pulpo.
Y después prácticamente siempre pido lo mismo:
No faltan las almejas al natural, los camarones cocidos, las navajas y las zamburiñas a la plancha.
Siempre un centollo, una centolla, o los dos.
A veces, solo a veces, unos percebes recién cocidos, calentitos...
Y después pescado, a la gallega. Yo prefiero la lubina salvaje (si es la colita mejor), pero también tienen un buen rape, rodaballo y, como no, merluza.
Aunque vaya con gente que le apetezca más la carne (y encima muy hecha...., esto es lo que no me gusta, pero para gustos: los colores).
Y como no, rematamos con la tradicional tarta de Santiago y unas filloas, acompañadas de sus oportunos licores (orujo, hierbas y licor café).
Pedazo de homenajes que nos metemos, lástima que sea solo de Pascuas a Ramos...
Os invito a que lo conozcáis, eso si, yo invito y vosotros pagáis, y por cierto, llevar efectivo, no porque sea caro, es que el tema de las tarjetas no funciona. La culpa: igual de las malditas comisiones...
¡GALICIA CALIDADE!
Nada más sentarte Adriano te suele llevar unos bígaros y algo más, hoy un salpicón de pulpo.
Y después prácticamente siempre pido lo mismo:
No faltan las almejas al natural, los camarones cocidos, las navajas y las zamburiñas a la plancha.
Siempre un centollo, una centolla, o los dos.
Y después pescado, a la gallega. Yo prefiero la lubina salvaje (si es la colita mejor), pero también tienen un buen rape, rodaballo y, como no, merluza.
Aunque vaya con gente que le apetezca más la carne (y encima muy hecha...., esto es lo que no me gusta, pero para gustos: los colores).
Y como no, rematamos con la tradicional tarta de Santiago y unas filloas, acompañadas de sus oportunos licores (orujo, hierbas y licor café).
Pedazo de homenajes que nos metemos, lástima que sea solo de Pascuas a Ramos...
Os invito a que lo conozcáis, eso si, yo invito y vosotros pagáis, y por cierto, llevar efectivo, no porque sea caro, es que el tema de las tarjetas no funciona. La culpa: igual de las malditas comisiones...
¡GALICIA CALIDADE!