miércoles, 23 de mayo de 2012

Engraulis encrasicholus a la bilbaína

A buen entendedor, pocas palabras bastan... ¿cómo?, ¿qué no?... Pues ya lo siento amig@s, porque yo no quiero entrar en polémica...

Vamos a ver, si estamos en Asturias hablaré del bocarte, y si estoy en el País Vasco tendré que mencionar a la anchoa; ahora que si ando por la costa mediterránea, digo boquerón...

En definitiva, que si me refiero únicamente al engraulis encrasicholus, seguro que todos me entendéis, seáis de donde seáis, estéis donde estés, ¿verdad? (jejeje).


Este pescadito (por su tamaño me refiero) es un manjar, una delicia para el paladar. Admite distintas preparaciones a cual más interesante: en salazón, al limón, fritos, rebozados, en vinagre, crudos (cuidado con el anisakis) y, donde quería llegar yo, a la bilbaína.

La bilbaína es una salsa a base de aceite, ajos, guindilla, vinagre y perejil. ¿De dónde vendrá esta salsa?...

Por lo tanto, y visto lo visto, yo creo que ahora es el momento de definir "correctamente" la receta de hoy: anchoas a la bilbaína.

Ingredientes (4 personas):

4 docenas de boquerón fresco
8 dientes de ajo
1 guindilla
Sal común
Vinagre de Jerez
Aceite de oliva virgen extra
Perejil

Preparación:

Le decimos a nuestro pescadero de confianza que nos limpie bien los boquerones, retirando con mucho cariño la espina central, sin separar los dos lomos.

Cuando estemos en casa los pasamos por el grifo, también con mucho cuidado y escurrimos sobre un papel absorbente.


Cogemos un plato llano y echamos un chorretón de aceite de oliva virgen extra, lo extendemos bien con las manos para cubrir todo el fondo y vamos colocando en forma de abanico los boquerones abiertos, bien escurridos y secos, con la piel hacia abajo. Reservamos.



Por otra parte, picamos fínamente los ajos y la guindilla en tiras (si está seca se cortará peor, que es lo que me ha pasado a mí).


En una sartén ponemos aceite de oliva virgen extra, de forma generosa, y cuando esté caliente echamos los ajos picados y la guindilla (nota 1: en este punto discutiré con algunos que opinan que se sofríe ligeramente primero el ajo, se retira y luego se frie la guindilla...).



Cuando estén sofritos ligeramente los ajos (sin que lleguen a estar ni dorados ni duros), retiramos del fuego y echamos el refrito sobre los boquerones que nos están esperando en los platos.


Colocamos en el centro unas tiras de pimientos del piquillo e introducimos en el horno precalentado a 200º C durante... POCO TIEMPO, unos cinco minutos, si, tan poco a simple vista, pero será suficiente para que se hagan. ¿No véis que son muy finos?...


Pasado este tiempo sacamos del horno, echamos unas gotitas de vinagre de Jerez por encima de los boquerones (nota 2: hilando con la nota 1, otros, o los mismos, dirán que el vinagre se sofrie en el aceite del ajo, en caliente...).


Presentacíón:

Con mucho cuidado de no quemarnos las servimos en la mesa sobre un salvamanteles.

Anchoas a la bilbaína.

Se puede picar perejil y echarlo por encima al momento (yo es que no tenía)...

¿Os ha gustado mi versión de anchoas a la bilbaína?.







10 comentarios:

  1. Pues sí me han gustado, y además a estas horas que estoy a punto de prepararme la cena. Has hecho que eche de menos tener unos buenos boquerones... porque me comía unos cuantos la verdad!!!

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  2. Uff, cómo tienen que estar... Probaré a hacerlos. ;)

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  3. ¡Impresionantes, sin duda !
    Ahorita me voy a mi norte, donde también les llamamos bocartes y
    me daré un homenaje.
    Saluditos

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  4. Querido amigo, nunca había puesto así los bocartes... en Cantabria también se llaman bocartes y de ellos sacamos las famosas anchoas de Santoña, que es como llamamos aquí los bocartes después de pasar por el curado de la salmuera y conservadas en aceite después.

    Un saludo

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  5. Vaya desayuno, ¡Ver esta preparación a estas horas es el suplicio de Tantalo, la inalcanzable comida!
    Tal vez si veo hoy unas buenas anchoas compre algunas.
    Saludos

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  6. Me han chiflado y me han entrado unas ganas increibles de comprar boquerones

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  7. Pues no conocía yo esta manera de preparar los boquerones, y los de Málaga somos unos enamorados de este pescado, azul por cierto, tanto que nos llaman "boquerones".
    Los tengo que probar así, ROMERO, buena receta, sí señor.
    Besitos

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  8. pues estupendos que te han quedado que maravilla,pero menudo nombrecito tienen los boquerones¡¡¡¡

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  9. siempre me sorprendes por algo y con los nombres mas

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  10. me ha encantado la forma que tienes de hacerlos, los hago seguro, es una forma diferente a la que normalmente estamos acostumbrados, venga un saludo.

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