viernes, 16 de noviembre de 2012

Pochas de Navarra con verduritas, níscalos y lomo de conejo relleno de monte...

El otoño es lo que tiene para la mesa, buenos productos: calabaza, setas, pochas frescas... y muchas cosas más. Por eso hay que aprovecharse de la temporada y proponer platillos que solo los podamos comer en este tiempo. Además, con el fresco que hace, el cuerpo lo pide, ¿no?...
 
Ingredientes (4 personas):
 
400 gr. de pochas tiernas (con vaina unos 750 gr.)
200 gr. de níscalos lactarius deliciosus
1 cebolla grande
1/2 pimiento rojo
1 conejo (si es de monte mejor que mejor)
Pimienta negra
Romero
Tomillo
Sal común
Aceite de oliva
 
Preparación:
 
Le pedimos a nuestro pollero que nos separe del conejo los muslos, las manitas y que nos saque los lomitos (si somos capaces lo haremos nosotros en casa).
 
Los lomitos los abrimos como si fuera un libro y los rellenamos con un poquito de romero seco, tomillo y una pizca de sal.


Cerramos formando un cilindro y los sellamos con unos palillos.


Pasamos por la plancha tanto los lomitos como los muslitos y las manitas, hasta que estén ligeramente dorados. Reservamos.
 
 
Por otra parte ponemos en una olla cuatro cucharadas de aceite de oliva y pochamos una cebolla cortada en brunoise.
 
 
Cuando esté bien caída, añadimos el pimiento también cortado en daditos y dejamos que se haga, a fuego lento, hasta que esté tierno.
 
 
A continuación incorporamos unos níscalos, previamente limpiados con un cepillito y cortados en trocitos.
 
 
 
Salpimentamos y rehogamos todo.

 
Una vez rehogado echamos las pochas y sofreímos ligeramente (y cuando digo ligeramente es poco, para que se envuelva bien todo, como un minuto, no más).

 
Cubrimos con agua, añadimos dos cucharadas de salsa de tomate e incorporamos las tajadas de conejo que habíamos pasado por la plancha y teníamos a la espera.

 
Rectificamos de sal. Subimos el fuego al máximo y cuando rompa a hervir lo bajamos al mínimo y tapamos la olla. Dejamos cocer en torno a hora y media (el tiempo dependerá de la calidad y tamaño de las pochas).

 
Pasado este tiempo apagamos el fuego y, sin abrir la olla, dejamos reposar hasta el día siguiente.
 
Ya está.

 
Solo queda calentar a fuego medio, con cuidado de que no se nos peguen y sacar el conejo. Cortamos los lomos en tajaditas y listo para emplatar.

 
Presentación:
 
En un plato hondo colocamos la ración de pochas con níscalos y verduritas y en el centro las tajaditas, bien de lomo, bien de muslito o de manita.
 
¡Ummmmmmmmmmm, qué rico!, si huele hasta aquí...

Pochas de Navarra con verduritas, níscalos y lomo de conejo relleno de monte.
 


 
 
 

7 comentarios:

  1. Impresionante plato !! y un paso a paso muy didactico, ni que decir tiene que debe de estar riquisimo, un abrazo.

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  2. Por fin has subido la receta que tanto estaba esperando, ROMERO!! Soy una entusiasta de la cocina de mercado, o sea, de lo que es propio de cada estación, y sólo tengo que visitarte en esta tu cocina virtual, para encontrarlo, ole!
    Cada día aprendo de ti, mi amigo :)
    Besitos.

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  3. Recetaza que te has marcado hoy, me parece muy interesante tu idea de rellenar el conejo...me la apunto, bss

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    1. Gracias Marga.
      El conejo lo puedes rellenar con lo que quieras (p.e. setas y cebolla y puerro y...). Como las setas ya iban en el guiso y el conejo era de granja... pues de monte, jejeje.
      Saludos.

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  4. Me ha gustado mucho este plato así que tomo buena nota de la receta con tu permiso para ponerla en práctica cuando tenga una oportunidad de conseguir buenas setas de temporada.

    Un saludo desde mi cocina y enhorabuena por este estupendo plato de nuestra cocina tradicional.

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